1. [26-Abril-09] Alma en Pena

Admin Mensajes : 8 Fecha de inscripción : 01/05/2009

A continuación, les dejo la primera leyenda transmitida en el Mitografo.

La historia nos habla acerca de una madre soltera de dos hijos, que vivían con sus hermanas y su madre. Mientras la familia estaba fuera de casa, por la escuela y el trabajo respectivamente, se quedaba solo con los pequeños. Como a eso de las 5 de la tarde, según relata, ella encendía el televisor y tomaba un descanso de los quehaceres del hogar. A esa misma hora, en muchas ocasiones, ella llegó a observar a un pequeño que vestía únicamente un pañal, entrando al cuarto donde sus hijos, dormían. Dicha aparición se repitió varias ocasiones más, pero creía que no eran sino alucinaciones causadas por el cansancio, además de que el niño no le causaba miedo alguno… eso fue hasta que cierta noche, despertó al sentir que alguien le tocaba la mano, una pequeña manita helada. Al verlo, frente suyo, sintió miedo y cambio de lugar. La noche siguiente, el hecho volvió a repetirse, pero esta vez le tocó los pies. Armándose de valor, habló.
--¿Qué te pasa? ¿Qué quieres? ¿Buscas a tu mami? Yo no soy tu mami. Dime quien es tu mami y te llevó con ella.
El pequeño se limito a verle con ternura, y decir:
--Mi mamá, mamá, mamá… -y se fue.
En la mañana, acudió con un sacerdote, quien le dijo que aquel pequeño, era un alma en pena, y que la próxima vez que apareciera, lo regañara.
Los días pasaron y no volvió a ver al pequeño, hasta que una vecina la visito, asegurando haber visto a uno de sus pequeños correr por las habitaciones, y ella le explicó lo que sucedía. Naturalmente la mujer se asustó y se fue.
Esa noche, el pequeño volvió a aparecer:
--Ven conmigo. Hace mucho frio allá… quiero que me abrases.-Dijo el pequeño.
--No… yo no soy tu madre… vete… tengo a mis hijos. Si me voy contigo ¿Quién los cuidara?
El pequeño, ante tan rotunda negación, lloró un rato y le agarró la mano.
--Cuídalos mientras duermen. Yo me fui cuando dormía, y ya no pude encontrar a mi mamita. Te quiero, mami.
Desapareció, y nunca más volvió a verlo. Hasta el día de hoy, asegura que, desea que el pequeño vuelva, y reza por su bien, todos los días.

Una hermosa y escalofriante historia ¿no creen? Al parecer, no todos aquellos entes que rondan a mitad de la noche, quieren asustarnos… algunos, buscan consuelo, amor… paz.